¿Qué significa realmente que un producto sea "libre de tóxicos"?

kabuorganic
Sep 16
2 min read

En el mundo de la belleza natural, cada vez escuchamos más frases como:"libre de tóxicos", "100% natural", "sin químicos dañinos"...

Pero, ¿qué significa realmente todo esto? ¿Es solo marketing o hay algo detrás? En este blog te explicamos qué debes buscar (y evitar) en la etiqueta de tus productos para que tomes decisiones conscientes que sí cuidan tu piel y tu salud.

¿Qué se considera un “tóxico” en cosmética? 🧪

Cuando hablamos de cosméticos “libres de tóxicos”, nos referimos a productos que no contienen ingredientes potencialmente dañinos para el cuerpo humano o el medio ambiente.

Estos son algunos de los más cuestionados:

Parabenos: conservantes que pueden alterar el sistema endocrino.
Ftalatos: presentes en fragancias, asociados con problemas hormonales.
Sulfatos (SLS/SLES): agentes espumantes que pueden irritar piel y ojos.
Formaldehído y liberadores de formaldehído: conservantes altamente controversiales.
Fragancias sintéticas: mezclas químicas no reguladas que pueden contener cientos de compuestos ocultos.

¿Natural = No tóxico? No siempre

Que un producto diga “natural” no significa automáticamente que sea seguro. Por ejemplo, aceites esenciales mal dosificados pueden causar reacciones adversas.

Lo ideal es buscar marcas transparentes, con fórmulas equilibradas y enfocadas en el bienestar integral, como Kabu Organic.

¿Cómo identificar un producto verdaderamente limpio? 🔍

✅ Ingredientes reconocibles (como aloe vera, manteca de karité, aceite de jojoba).

✅ Certificaciones orgánicas o ecológicas (cuando sea posible).

✅ Envases que indiquen claramente: libre de parabenos, ftalatos, sulfatos, etc.

✅ Marcas que educan, no solo venden.

¿Y qué hace diferente a Kabu Organic? ✨

En Kabu Organic, cada fórmula es elaborada artesanalmente, con ingredientes de origen natural, sin aditivos tóxicos, y pensadas para pieles reales.

No solo cuidamos tu piel: te enseñamos a cuidarte desde el amor propio y la conexión con la naturaleza.

No se trata de tener un baño lleno de productos “naturales”, sino de elegir con intención. Un solo producto bien formulado y libre de tóxicos puede hacer más por tu piel que cinco llenos de ingredientes dudosos.